Despegando hacia el Futuro: La Escuela de Vuelo FALCONER de Marcos Juárez

La Pasión que Toca el Cielo

En el corazón de Marcos Juárez, una ciudad conocida por su rica tradición en periodismo, automovilismo y, sobre todo, aviación, se erige la Escuela de Vuelo FALCONER. Un lugar donde los sueños de volar se convierten en realidad, y donde Roberto Tomassoni, una figura en el mundo de la aviación, comparte su pasión y conocimiento con la próxima generación de pilotos.

Una Familia Alada

"Somos todos medios aeronáuticos en la familia," declara Roberto Tomassoni, reflejando la profundidad de su vínculo con el cielo. Desde su esposa Carla, contadora y piloto privado por hobby, hasta su hijo, ya instructor y piloto agrícola, la aviación es más que una profesión para los Tomassoni; es un estilo de vida.

Diversidad en las Nubes

La escuela no solo es un punto de encuentro para los entusiastas locales de la aviación sino que también ha atraído a estudiantes de diferentes partes, incluyendo a Andrea Garay, una joven piloto que, a diferencia de la mayoría, ha elegido especializarse en la aviación agrícola.

"Generalmente, la mujer un poco se aboca a la parte del vuelo comercial... Pero en la gran mayoría de las mujeres un poco apuntan a la carrera de piloto comercial," explica Tomassoni, destacando la diversidad de aspiraciones entre sus estudiantes.

Una Trayectoria Celestial

Desde sus inicios, impulsado por la pasión que nació al ser llevado al Aeroclub de Marcos Juárez por su padre, Roberto ha dedicado casi 37 años de su vida a la aviación.

Su carrera lo ha llevado a volar tanto en Argentina como en el exterior, combatiendo incendios en Chile y trabajando en Estados Unidos, entre otros.

Encuentros en Altura

La Escuela de Vuelo FALCONER no solo es reconocida por su calidad educativa sino también por ser un punto de encuentro para figuras importantes del ámbito aeronáutico y más allá. "Por la escuela han pasado presidentes, gobernadores, artistas," comparte Roberto, subrayando el vasto alcance de sus conexiones gracias a la aviación.

Acrobacias en el Horizonte

Aunque la acrobacia aérea no forma parte de sus especialidades personales, Roberto admira profundamente a aquellos que la practican con maestría, como su amigo Sergio Marínhas.

"Es la persona más capacitada en el tema de la acrobacia aérea, un excelente profesional," afirma. La precisión y la unión entre piloto y máquina son fundamentales en esta disciplina, algo que Sergio domina a la perfección.

Mirando hacia el Futuro

Con una invitación abierta a Ricardo, el entrevistador, para experimentar el vuelo de primera mano, la Escuela de Vuelo FALCONER se proyecta hacia el futuro, manteniendo viva la llama de la aviación en Marcos Juárez.

"Estás invitado obviamente cuando quiera pasar por la escuela y podamos tener la pista lista, inclusive a disfrutar algún vuelo," ofrece Roberto, extendiendo su pasión por el vuelo a todos los que sueñan con surcar los cielos.

La Escuela de Vuelo FALCONER no solo forma pilotos; forja una comunidad unida por el amor al vuelo, con historias que se entrelazan en el vasto cielo azul.

La aviación en Marcos Juárez es más que una actividad; es un legado que continúa elevándose, llevando consigo las esperanzas y sueños de muchos.