Laura Catala, presidenta de la Fundación Docente Marcos Juárez, hace 14 años que forma parte del Centro de Aprendizaje Universitario que depende de la Universidad Siglo 21.

“Fuimos pioneros en estar presentes en ciudades chicas donde la necesidad era gente de mediana edad que necesitaba terminar sus estudios y hoy se dio un cambio muy importante sobre todo después de la pandemia, donde los alumnos que egresan del nivel medio ya nos tienen como primera opción”, aclaró la profesora del CAU que hoy cuenta con 44 mil alumnos en todo el país y son la universidad privada más elegida. 

Hay tecnicaturas cortas, tienen jornadas de capacitación, el seguimiento a cada alumno se hace, en donde pueden estudiar acá y en cualquier lado del mundo ya que los contenidos están totalmente actualizados. Asimismo, la universidad incursionó este año en las carreras de salud. 

Expresó Laura: “Sigo en la educación, que es la base para todo. Cada vez lo vamos a necesitar más y dejaré fuera cualquier otra cosa. Tenemos continuamente pasantes rentados que piden las empresas de la zona, hay un cambio importante”. 

Hoy cuenta con 525 mil pesos semestrales que si un alumno tiene que trasladarse, “no hacemos nada con eso. Incluso los alumnos tienen salida laboral aquí. Ellos ya conocen el sistema, sabemos su objetivos, entonces le abrimos puertas a nuestros mismos estudiantes que son chicos jóvenes de 19 a 25 años. Van proyectándose dentro de la misma fundación docente. Algunos ya están como coordinadores de zona, van avanzando también”.

A su vez, este año tendrán más de 200 egresados. “Hay un apunte muy importante de lo que se hizo en educación distribuida por la acción del tutor de aprendizaje presencial. Ahora tiene el nombre de dinamizador, al cual se le da un papel más importante al tutor, es el que prepara la clase, arma el equipo más tirando a un perfil docente. El tutor que está en el CAU es el que coordina los grupos y se le da cada vez más herramientas para que actúe en ese grupo”.

Sobre sus 14 años en la institución: “Agradezco a todos los que me dieron el empuje para que tomara esto porque personalmente para mi fue un giro de 360 grados. La Siglo 21 es un monstruo en gran sentido, te mueves dentro de un ambiente donde te abren los ojos y te dicen vamos para allá. El orgullo de formar parte de la mesa chica y estar presente en las grandes decisiones de la Siglo. Estoy orgullosa del valor que se me ha dado. Es una gente realmente maravillosa”.