Dario Cano cumplió 30 años como integrante de la cooperativa de obras y servicios públicos, Coyspu. Tuvo otros trabajos en proyectos privados apenas se recibió como ingeniero, ingresó en el año 1993 a la institución como encargado del área técnica y desde 2004 hasta la actualidad se desempeña como gerente general. “Estos 30 años fueron un gran desafío pero lo tomo como un gran aprendizaje”. 

“Por ser el tipo de empresa que catalogamos como empresa intermediaria que es privada, tiene que gestionarse como lo hace cualquier empresa privada para poder dar servicios a la gente; y tiene que tener ese equilibrio de no tener muy cerca el objetivo del lucro. Gestionar este tipo de empresas tiene una particularidad que la hace muy interesante. Hay que estar y crecer con los errores, el error tomándolo como concepto de aprendizaje, es muy importante”, destacó el gerente. 

“La Coyspu me ha dado más de lo que yo le di a la institución. Más allá de la cuestión personal, es muy interesante que las generaciones vayan de alguna manera superando a las otras porque eso quiere decir que uno pueda ver un crecimiento. La Coyspu me dio la posibilidad de sentirme parte de una organización y estoy muy agradecido. Yo también he tratado de aportar. En el liderazgo, uno trata de visualizar en cada uno de los componentes de la organización sus potenciales que tiene cada persona”. 

“La posibilidad que me dio la Coyspu de poder ser uno más en el engranaje de una organización que tuvo mucho que ver con el desarrollo de Marcos Juárez”, sumó.

“Le doy un agradecimiento de ir pudiendo cumplir las etapas a su determinado tiempo. Poder ser parte de todo este proceso, creo que si todos los días te levantás con un desafío y con la posibilidad de resolver algo y que puedes aprender, es el camino correcto. Volvería a hacer todo lo que hice porque el resultado es muy positivo”.